Vergonzosa final del torneo amistoso Sub-20
miércoles, 24 de noviembre de 2010
El juez de Burkina Faso Serge Paulin Ilboudo favoreció a Bolivia y anuló cinco goles legítimos a Paraguay. Encima le regaló un penal, que el DT Sandy ordenó al ejecutor que falle.
Santa Cruz / El Deber.- Aunque fue un torneo amistoso de preparación de cara al Sudamericano de Perú (16 de enero al 6 de febrero), Argentina celebró el título de la Copa AeroSur Internacional Sub-20 a todo pulmón. Es que como dijo su técnico, Wálter Perazzo: “Los éxitos siempre dejan cicatrices positivas”. La albiceleste se coronó tras vencer por 2-0 a una aguerrida Colombia, en un partido disputado anoche en el estadio Tahuichi. En el enfrentamiento por el tercer lugar, Paraguay derrotó por 2-1 a Bolivia, en un cotejo que tuvo un arbitraje vergonzoso en favor de los nacionales.
Para los dirigidos por Perazzo también fue una revancha el triunfo, pues ambos rivales se enfrentaron hace dos meses en una final en Paraguay en un torneo de la misma categoría. En esa ocasión, los ganadores fueron los cafetaleros por 1-0. Anoche la historia fue otra, pues los argentinos se mostraron sólidos y contundentes, con goles clave en ambos tiempos, cuando los colombianos empezaban a crecer.
El primer tanto fue obra de Facundo Ferreira (15’), quien anotó de potente remate luego de que el balón le quedara servido tras un rebote. El 2-0 fue un autogol que se dio después de que otro defensor, Lucas Rodríguez (49’), rematara potente y el balón se desviara en Luciano Ospina.
En el partido preliminar, Bolivia cayó por 2-1 ante Paraguay, resultado que pudo ser más abultado de no ser por los cinco goles que el árbitro de Burkina Faso Serge Paulin Ilboudo le anuló a los delanteros guaraníes por supuestas posiciones adelantadas. Para acabar con su pésima actuación en beneficio de los nacionales, el juez cobró un penal al minuto 94, pero el técnico boliviano, Marco Sandy, porque la situación ya era vergonzosa, le dijo al jugador Diego Rivero que lo falle, situación que al final sucedió. Mientras esto pasaba, los paraguayos, en protesta, amenazaron con salirse de la cancha.
Los goles del ganador fueron obra de Iván Vargas (15’ y 90’), mientras que Rodrigo Borda (13) había puesto en ventaja a los bolivianos con remate potente desde unos 30 metros.
Los jueces africanos dieron la nota negativa del torneo.