Crisis de FBF: Gobierno acepta reunión con la FIFA y CONMEBOL
La dirigencia del fútbol boliviano ve una puerta abierta en la reunión que mantendrán las comisiones de alto rango de la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) y la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) con el presidente del Estado Plurinacional, Evo Morales Ayma, luego de la aceptación oficial del jefe de Estado, hecha a conocer ayer en conferencia de prensa efectuada en Palacio de Gobierno, por el vocero presidencial, Iván Canelas.
“Recibimos con beneplácito la respuesta positiva brindada por el presidente del Estado Plurinacional, Evo Morales Ayma, para recibir a las comisiones de alto rango de la FIFA, así como de la Conmebol”, sostuvo Alberto Lozada, gerente general de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), haciendo eco de la información brindada por Canelas ayer en La Paz.
El motivo central de la audiencia solicitada por los dirigentes de la FIFA y la Conmebol con el presidente Morales Aima, es buscar los canales necesarios y puntos de coincidencia que permitan encontrar una salida a la deuda impositiva por 15 millones de bolivianos que mantiene la FBF con el Estado, debido a la venta de 12 mil entradas en el Mundial de Fútbol de 1994.
Sin embargo, el principal asunto parece excluido de la futura reunión, sin fecha establecida, debido a que la respuesta del presidente Morales señala que así como el Ejecutivo no se entromete en los asuntos del fútbol, debe ocurrir lo mismo (“viceversa”) con el fútbol; no entrometerse en la política gubernamental ni en los asuntos de Estado.
“Es la respuesta que esperábamos porque abre las puertas al diálogo franco con las autoridades de Gobierno; es una audiencia que venimos buscando hace tiempo para exponer nuestros puntos de vista”, complementó el gerente del ente rector del balompié nacional.
Así, pese al tenor de la respuesta gubernamental, Lozada se mostró optimista por el resultado de la audiencia entre el presidente Morales Ayma, la FIFA y la Conmebol.
Dirigentes desconocidos
La nota enviada por el presidente del Estado Plurinacional, hace conocer (por si no lo sabían los dirigentes de la FIFA y la Conmebol) de los problemas generados por la reelección de los directivos de la federación y el desconocimiento de varios de ellos por algunos clubes profesionales.
En partes salientes, la carta dirigida a Joseph Blatter, presidente de la FIFA, dice así: “Me alegra saber que usted conoce los problemas que afronta la Federación Boliviana de Fútbol, no sólo el económico, sino de división profunda de sus dirigentes. Algunas de las asociaciones y los equipos que participan en el torneo oficial de la Liga, incluso desconocieron a los dirigentes elegidos”.
“Esta situación provocó una serie de protestas de los ciudadanos, principalmente por las denuncias en contra de los actuales dirigentes. Mi Gobierno se mantuvo al margen de ello, debido a que las acusaciones deben ser aclaradas e investigadas”, señala.
Respeto a las leyes
En otro párrafo de la carta, Morales Ayma asevera que no hará nada que salga del marco legalmente establecido en Bolivia.
“Mi Gobierno siempre ha apoyado y cooperado con el deporte, estamos siempre dispuestos a hacerlo, en el marco de la ley, sin vulnerar ninguna norma aprobada por los poderes del Estado para todos los ciudadanos e instituciones bolivianas”.
“Entendemos que los gobiernos no deben inmiscuirse en la organización del fútbol ni viceversa. Sin embargo, como señal de amplitud, estaremos dispuestos a recibir a la delegación de la FIFA y de la CONMEBOL, para conversar sobre temas que a todos nos interesa: el desarrollo, progreso del deporte y nuestro fútbol”.
Lo anterior, es interpretado como la confirmación de la negativa del Poder Ejecutivo de discutir con la Federación Boliviana de Fútbol, la FIFA, o cualquier otro interlocutor, el pago de la deuda impositiva que asciende a 15 millones de bolivianos.
Con Morales
La Federación quiere estar en la cita
Pese a los muchos intentos sin éxito realizados hasta ahora, los dirigentes de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) esperan estar presentes en la audiencia concedida a la FIFA por el presidente Evo Morales Ayma, así como la Conmebol, para hablar sobre el desarrollo del fútbol en el país.
El gerente de la federación, Alberto Lozada, consideró que junto a las dos comisiones de la FIFA y la Conmebol deben asistir dirigentes de la entidad debido a que son anfitriones y tienen conocimiento de la problemática del fútbol doméstico y de la crisis que se atraviesa.
“En un momento determinado pueden haber consultas que necesariamente debemos absolver nosotros como federación”, sostuvo el gerente.
El caso es que pese a que el presidente de la FBF, Carlos Chávez, y otros dirigentes solicitaron en más de una oportunidad una audiencia, el primer mandatario negó sistemáticamente esta posibilidad.
En criterio del gerente, la actitud de Morales, “se debe a que le informaron mal sobre la problemática del fútbol”.
Atentos al remate
Pese a que se abrió una ventana a la esperanza, la Federación Boliviana de Fútbol no pierde de vista el proceso de remate de su edificio central sobre la avenida Libertador Simón Bolívar, frente al estadio Félix Capriles, de Cochabamba, previsto por Grandes Contribuyentes (Graco) para el 20 de septiembre, mediante aviso público.
El remate se efectuará con base en el avalúo catastral de la Alcaldía Municipal de Cercado, de poco más de tres millones de bolivianos, que significan alrededor del 25 por ciento de la deuda por impuestos, que alcanza los 15 millones de la misma moneda, que reclama el fisco al ente federativo.
Alberto Lozada confirmó que se buscan los mecanismos legales para posibilitar la participación de la federación en la acción ejecutiva, con el propósito de evitar que el bien inmueble pase a terceras personas.
“La federación no puede participar como tal en este remate, pero buscaremos alguna otra alternativa, puede ser en su caso la Asociación Nacional de Fútbol o alguna otra entidad ligada a nuestra institución”, señaló Lozada.
Hace poco más de dos años, la federación realizó una acción parecida,por la que salvó del remate el edificio donde funcionan sus oficinas centrales y de la Liga del Fútbol Profesional Boliviano. En apariencia, sólo se trató de una solución parcial.